Hoy quería hablaros de una tela que se comercializa hace relativamente poco, y que tenía muchas ganas de probar. Se trata de una tela "de pizarra" es negra y plastificada y permite pintar encima bien con tiza normal, o con rotulador de tiza si queremos que no se borre fácilmente (se borraría aplicando agua). La compré sin tener ni idea de qué hacer con ella, pero en seguida la utilicé para varios proyectos bastante diversos…
En primer lugar, para un monedero-tarjetero para mi marido, para sus salidas en bicicleta. Tiene el tamaño justo para poner el iphone, algo de dinero, DNI y tarjeta. Me pareció perfecta, pues al ser impermeable, no se mancha. Otra ventaja es que al cortar no se deshilacha el borde, por lo que no es necesario hacer dobladillos. Yo hice un pespunte con la máquina de coser para que quedase mejor terminado, pero no es necesario hacer nada. La única precaución que tuve, fue cambiar la aguja a una del 90, pues la tela es rígida y más gruesa de lo normal. No tuve ningún problema, y lo cosí como si fuera una tela normal :)
Otra aplicación que encontré, fue la noche de fin de Año, fue una idea improvisada de última hora. A la hora de hacer los marca sitios, se me ocurrió que podía hacerlos en las copas y así cada cual tendría localizada la suya toda la noche. Para hacerlo, tan fácil como coger la copa que vayamos a utilizar, trazar el perímetro, cortar, y quitar del centro un agujero del diámetro del palito de la copa. Un corte radial para poder introducirlo y voilà.
Los dos son proyectos muy sencillos, pero me ha gustado mucho experimentar nuevos materiales. Ya tengo futuros experimentos rondando por la cabeza, pero esos serán para un próximo post…
Espero que os haya gustado, hasta la próxima!